viernes, 29 de julio de 2005

Una Trampa por Partida Doble

En esta oportunidad quisiera compartir con ustedes algunas reflexiones sobre un tema difícil, espinoso, pero que no puede ser soslayado. Porque se está difundiendo un pensamiento que a mi humilde entender constituye una trampa por partida doble... porque divide a los que pretendemos defender a las instituciones castrenses y nos inhibe de actuar... nos inmoviliza... y tal vez sin quererlo nos lleva a hacerle el juego al gobierno y sus acólitos. Ya sea por nuestras acciones o por nuestras omisiones.

En los últimos días se difundieron a través de algunos medios de comunicación informaciones relacionadas con la situación militar, que rápidamente fueron descalificadas por ciertos analistas bien informados, que las atribuyeron a operaciones de prensa de sectores cercanos al gobierno, que necesitaban una reacción militar.

El gobierno buscaría la reacción castrense como parte de su campaña política... porque habría tomado conciencia de que por más caja que reparta, los números no le alcanzan para lograr sus objetivos. Sabe que aún ganando, su triunfo representará una derrota en el sentido plebiscitario de su gestión.

Por eso el gobierno estaría provocando a los militares para que se produzca una asonada, que le permitiera aglutinar a la opinión pública en contra de los “militares derechistas genocidas”... un camino ya recorrido por Raúl Alfonsín durante su campaña política en la década del 80.

Ahora bien, sin tomar partido respecto a la existencia o inexistencia de tal operación psicológica por parte del gobierno (ya todos sabemos que Horacio Verbitsky, como miembro de la inteligencia montonera, es un maestro en el arte de la desinformación y manipulación de las informaciones), lo cierto es que su contracara también constituye un punto favorable para el régimen kirchnerista. Porque son muchos los miembros de la familia militar que para evitar contribuir a esta teoría conspirativa de nuestros gobernantes, permanecen sufriendo en silencio, sin siquiera una mueca de dolor, los embates permanentes del régimen progresista que supimos conseguir.

Si nos movilizamos en apoyo de las fuerzas armadas, defendiendo la verdad respecto a lo sucedido en la década del 70... le estaríamos haciendo el juego al gobierno por alimentar su teoría conspirativa; pero si nos quedamos en casa mirando como discurre la historia por televisión... también facilitamos su accionar disolvente, porque el resultado es el mismo... los hombres que combatieron contra la subversión terminarán entre rejas... más o menos cómodos, en cárceles comunes o en unidades militares, pero siempre privados de su libertad. Ese es el punto... mientras los que pretendemos tener una memoria completa, continuamos debatiendo si es o no conveniente salir a la calle antes de las elecciones.

¿Es que pensamos que si no reaccionamos el gobierno dará marcha atrás en la persecución sistemática a los uniformados? ¿Creemos por ventura que si el gobierno no alcanza el apoyo deseado en las elecciones de octubre tomará automáticamente conciencia de los errores cometidos contra las instituciones? ¿Acaso no registra en el presente un récord en la firma de decretos de necesidad y urgencia?. Con esto no pretendo anular la importancia de los comicios de octubre... pero tampoco seamos tan necios de pensar que la caza de militares terminará si en la cámara de diputados o senadores se registra un mayor o menor número de opositores. El CELS y las supuestas organizaciones defensoras de los derechos humanos continuarán su funesto accionar sin importarles el grado de apoyo con que cuenten... Para ellos la guerra no ha terminado y nuestro silencio, nuestras omisiones, nuestras divisiones, no hacen otra cosa que envalentonar su estrategia sin tiempo.

Por supuesto que no pretendo, ni aliento una asonada militar... eso sí sería hacerle el juego al poder político... creo que gracias a Dios la democracia llegó para quedarse en nuestra Patria... pero tampoco la inacción generalizada o el olvido unilateral contribuyen a la reconciliación nacional.

Tenemos que demostrarle a la ciudadanía que el revanchismo desbocado y extemporáneo de nuestro presidente genera división y fractura en el seno de la sociedad. Tenemos que demostrarle a nuestros compatriotas que la mirada hemipléjica hacia el pasado es en gran parte la responsable de nuestra incapacidad para construir un futuro digno de ser vivido para nuestros hijos.

Y para eso es importante que la familia militar, entre otros sectores que componen la sociedad, se comprometa... que abandone la ilusión de pensar que las cosas mejorarán por sí mismas... que comprendan que deben salir a la calle para pedir por sus familiares y reivindicar sus derechos... Un pequeño grupo de nostálgicos revolucionarios solapados detrás de organizaciones de derechos humanos ha convencido a la población de que sus maridos, padres e hijos, son asesinos genocidas y no soldados de la patria. Debemos demostrar lo contrario... pero para ello hace falta un mayor compromiso cívico...

Valga para nosotros la amonestación que le diera su madre al último rey moro de la España ocupada: “No lloréis como mujeres lo que no supisteis defender como hombres”.

El próximo 23 de agosto, día en que se recuerda el trigésimo aniversario del asesinato del Coronel Argentino del Valle Larrabure, tenemos una oportunidad única de manifestar en la Plaza Mitre , frente al busto levantado en su honor, que la Pacificación Nacional sólo será posible si nosotros se lo exigimos a nuestros gobernantes... Hasta la próxima.

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viernes, 22 de julio de 2005

Revista Veintitrés – Oraciones Peligrosas ¿Investigación Periodística o Panfleto Político?

En el año 1959, ni bien la Revolución Cubana de Fidel Castro alcanzaba su triunfo y se iniciaba la más sangrienta dictadura de Latinoamérica, la conducción comunista de la isla puso en funcionamiento un aparato de propaganda para expandir los principios de la revolución. Para tal fin, el entonces periodista y posterior terrorista argentino Jorge Masetti, por pedido expreso del dictador cubano, creaba la Agencia Cablegráfica de Noticias Prensa Latina.

Que quede claro, este organismo formaba parte del servicio de inteligencia de Fidel Castro... su compromiso era con la revolución marxista y no con la verdad histórica que debe defender todo periodista que se precie de tal.

El 21 de julio de 2005, la Revista Veintitrés , de la mano del joven ideólogo Andrés Klipphan, sin nada que envidiarle a Página 12, se constituye en un órgano de avanzada de los mismos intereses mezquinos, sectarios y alejados de la verdad. Al igual que la Agencia de Fidel, la publicación considerada apela a la mentira, el engaño, a las medias verdades y a la descalificación personal, para escribir una presunta investigación relacionada con las “Andanzas de Monseñor Baseotto”.

Empieza la nota con una frase antojadiza y mentirosa referida a las misas oficiadas por el Obispo Castrense: “Se citan en secreto”, afirma. Apoya esta aseveración en presuntas declaraciones mías concedidas de buena fe, en un reportaje del que seguramente se perdió la grabación y los periodistas se habrán visto obligados a inventar lo más conveniente para apoyar sus pobres conclusiones.

Porque las Misas de Monseñor Baseotto nunca fueron secretas ni clandestinas, sino abiertas a todo el público. Cualquier persona puede concurrir a las mismas, basta con acercarse a la Catedral Castrense y preguntar en la Secretaría. Si existen invitaciones por email estas se llevan a cabo entre amigos que por compartir la misma fe, quieren aprovechar todas las ocasiones para escuchar y acompañar al Pastor elegido por el Vicario de Cristo, para guiar al rebaño castrense en su peregrinar por el mundo.

Se trata de Fe, de piedad, de vida interior y no de política. ¿Porqué no nos dejan vivir plena y libremente nuestra Vida Cristiana? ¿Tiene idea el señor Klipphan lo que representa un Obispo de la Iglesia Católica para un creyente? ¿Sabe que para un católico el Obispo tiene la triple y plena potestad de Gobernar, Enseñar y Santificar a sus fieles?. Ya que la revista Veintitrés está tan preocupada por la difusión de las actividades del Obispado Castrense, me comprometo a mantenerlos informados y espero sinceramente que la familia militar pueda encontrar en sus páginas un espacio gratuito para la comunicación masiva de sus acciones.

Continúa este aficionado afirmando que Monseñor Baseotto es el “obispo que propuso ponerle una piedra al cuello al ministro de salud, Ginés González García, y tirarlo al mar, en macabra alusión a los vuelos de la muerte de la dictadura”. Sin lugar a dudas la interpretación de texto no constituye uno de los fuertes de este novel ideólogo, disfrazado de periodista.

Me pregunto si esta pública acusación hacia un genuino representante de la Iglesia Católica no merece la intervención de la justicia por injurias infundadas, ya que ha sido una Jueza de la Nación , la Dra Servini de Cubría, quien rechazó terminantemente la interpretación antojadiza del poder ejecutivo y sus mercaderes, advirtiendo que "la acción desplegada por el Obispo no constituye ninguna de las hipótesis contempladas en los denunciantes, por cuanto ya sea dentro del contexto en que se enviara, como también en su interpretación literal, la misiva suscrita por Monseñor Baseotto no sólo no hace mención alguna a los sucesosseñalados por los denunciante,s sino que tampoco ofende el bien común".
Agrega que la carta del prelado “no hace exaltación, ponderación o elogio de ningún hecho criminal específico sino que el pasaje que se critica resulta una simple remisión literaria formulada por la autoridad eclesiástica, sobre una obra que para su credo es la base misma del culto que profesa y cuya redacción quien la señalara considera inspirada por Dios... si las expresiones de la carta se interpretaran como un delito implicaría vulnerar la libertad y autonomía de la que gozan las agrupaciones religiosas". ¿Es que puede alguien en su sano juicio tener alguna duda de lo que estas afirmaciones representan?.

Más adelante, la publicación continúa con los tradicionales agravios viles e insolentes que caracterizan la falta de argumentos de los apóstoles del pensamiento único, para quienes existe una asociación automática entre las palabras militares, represores, policías, genocidas, tradicionalistas, derechistas, reaccionarios, etc.

Así por ejemplo, el Mayor Juan Carlos Leonetti, quien muriera en un enfrentamiento con los líderes del Ejército Revolucionario del Pueblo, pasa a ser el líder de una patota militar. Los que acudimos a escuchar al Obispo Castrense no somos un grupo humano que piensa diferente, sino partes de una fauna, eufemismo utilizado para no llamarnos abiertamente animales.

Mientras que la justicia todavía no se ha expedido en torno a la culpabilidad o inocencia de algunos miembros de las fuerzas armadas bajo proceso judicial, como por ejemplo el Oficial de la Marina Ricardo Cavallo o el teniente coronel Daniel Amelong, para este científico del periodismo, estos ya son represores y torturadores de la peor calaña. ¿Es que se puede opinar tan alegremente en este país?. ¿Dónde queda el principio jurídico de que todo ciudadano debe ser considerado inocente hasta que se compruebe lo contrario?.
En otro de los párrafos, la nota en entredicho acusa terminantemente al Obispo Castrense de haber roto el pacto consensuado entre los cancilleres del Vaticano y de Argentina, al atribuirle manifestaciones irritantes al gobierno, a través de distintas homilías. Las partes reproducidas de las mismas ponen de manifiesto la ausencia de valores éticos profesionales por parte del periodista, o en su defecto una alarmante pobreza intelectual. Y decimos esto porque todos los sermones reproducidos en la investigación fueron impartidos con anterioridad al presunto pacto entre ambos estados. En otras palabras, se acusa al inculpado de haber roto un presunto acuerdo a través de declaraciones efectuadas con anterioridad a la existencia del mismo.

Para terminar, mi querido Klipphan... podemos pensar distinto en muchos temas. Gracias al cielo y a los militares que derrotaron a la subversión, todavía podemos disfrutar de alguna libertad de expresión en nuestra querida patria... pero por favor, seamos sinceros... la investigación periodística es un trabajo serio que requiere cuando menos de rigor intelectual y objetividad en el razonamiento. “Oraciones Peligrosas” podrá ser una brillante pieza comunicacional para un discurso de barricada de la Senadora Cristina Fernández de Kirchner... pero ambos sabemos que de trabajo de investigación no tiene nada.

Tampoco lo mío, por cierto, pero por lo menos yo no soy periodista ni intento engañar a mis lectores. A propósito del discurso, perdón de la nota... ¿Resulta más redituable escribir panfletos para la campaña política del gobierno? Hasta la próxima.

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viernes, 15 de julio de 2005

Cristina, Chiche... Bendini y D'Elía...

Mucha agua ha corrido bajo el puente desde nuestro último contacto... Pero aquí estoy de nuevo para compartir con ustedes algunas reflexiones, que a mi juicio tocan muy de cerca nuestra esencia republicana.

Cristina y Chiche...

En primer lugar, no puedo evitar referirme a la ruptura palaciega en el seno del Partido Justicialista. ¿Estamos realmente en presencia de una división, de un quiebre auténtico del partido más popular de los últimos tiempos en la República Argentina ?. Y si ello fuera así, ¿Constituye un aspecto positivo o negativo para la salud política de nuestra dolorida Patria?. Estas y otras preguntas, nos obligan a tomar partido, aunque nuestro análisis sea una aproximación limitada, que como toda especulación humana, no alcance a agotar las profundidades de un conflicto que promete dejar huella en la historia de Argentina.

Vayamos por parte. La ruptura manifiesta... ¿Irá en serio o formará parte de una estrategia maquiavélica para anular a la oposición y permitirle al justicialismo quedarse con las tres bancas en el Senado de la Nación ?. Debo reconocer que esta hipótesis ganó intuitivamente mi mente desde los primeros instantes de la contienda. Ni kirchner, ni Duhalde, los reales protagonistas de esta pelea de fondo, han sido campeones del respeto a las instituciones republicanas. Uno y otro, en sus respectivos feudos provinciales y desde lo alto de la investidura presidencial, se han caracterizado por encarnar un personalismo hegemónico donde la acumulación de poder se constituyó en la esencia de sus gestiones.

Entonces... ¿son realmente distintos los modelos políticos que encarnan las dos mujeres elegidas democráticamente por el dedo todopoderoso de sus respectivos maridos?. ¿Se puede decir que mientras Kirchner representa un peronismo de izquierda, al estilo setentista de los montoneros, Duhalde se constituye en el prototipo del auténtico justicialismo de los mejores tiempos de Juan Domingo?. ¿Existen realmente diferencias de fondo entre ambos dirigentes como para aceptar este pensamiento sin algunas reservas insalvables?.

Creo que no... para comprenderlo baste con recordar que Kirchner asumió la presidencia porque Duhalde lo bendijo con su apoyo para contrarrestar el poder de Menem y que a lo largo de estos dos años de gobierno, el hombre fuerte de la provincia de Buenos Aires lo acompañó al improvisado sureño en todas sus aventuras de comité, hasta el punto de haberse declarado partidario de la remoción de Monseñor Baseotto, cuando el afiebrado emperador quiso dar muestras de su poder ante la Iglesia. ¿Qué harán ahora ambos contendientes cuando hasta la propia justicia ha declarado sin rubores que nada legitima la interpretación antojadiza que ambos hicieran de la encendida defensa de la vida de este digno sucesor de los Apóstoles?.

Con tal vez una concepción más moderada en el discurso de la Chiche , ambos políticos encarnan una visión de la política, con ambiciones personales al margen de las necesidades de la gente. Hoy están duramente enfrentados... pero, ¿será lo mismo una vez terminada la contienda electoral? ¿Podrá decirse que los candidatos del duhaldismo serán una auténtica oposición para este régimen basado en el odio y la revancha o por el contrario, terminarán negociando las esferas de poder una vez que la ciudadanía haya cumplido su parte en el libreto expresando su voto en los comicios?.

Desgraciadamente, los antecedentes de ambos contrincantes no me inspiran ninguna confianza, y a mi humilde entender esta transitoria división del peronismo sólo servirá para confundir aún más a la ciudadanía, quitándole votos a la única oposición real y genuina que se le puede presentar a este régimen de oprobio. Argentina sigue sin encontrar una alternativa viable al histórico caudillismo populista... y mientras no lo encuentre seguirá en la dirección del partido único, errando el camino en la construcción de una verdadera república.

El Gran Piquetero se hace fuerte en Campo de Mayo.

Finalmente, no puedo dejar de hacer una breve referencia al Congreso de los Piqueteros organizado por Luis D'Elía en las instalaciones del Ejército en Campo de Mayo. Los cuarteles del glorioso Ejército Argentino al servicio de un delincuente amparado por el gobierno. El especialista en asalto a comisarías, escraches a personalidades de la oposición y boicots a empresas de la “oligarquía”, se ha ganado la confianza y el respeto del Jefe del Estado Mayor del Ejército.

Por supuesto que todo tiene su precio y este ascenso vertiginoso en la cadena laboral, pasando de ordenanza acomodador de cuadros a prestamista corredor de inmuebles, seguramente le costará una pérdida de liderazgo en las filas de la institución que preside... pero claro... ese es un valor que no cuenta monetariamente... y hay que preparar el futuro... quien dice que en esta Argentina dada vueltas... alguna embajada sea el premio a este general de tan triste trayectoria. Venezuela, Cuba o Nicaragua serían buenas opciones ¿no les parece? .

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viernes, 1 de julio de 2005

Argentina - El Mundo al Revés

El 23 de junio el pueblo argentino fue sorprendido con una sorprendente e indignante noticia. Enrique Haroldo Gorriarán Merlo presentaba en sociedad, en la ciudad de Rosario, su nueva agrupación política, el Partido del Trabajo y el Desarrollo (PTyD).
Mientras el presidente Kirchner enviaba a sus empleados piqueteros a boicotear toda aparición pública del Candidato de la oposición, Ricardo Lopez Murphy y la Unión Cívica Radical hacía los propio con Domingo Cavallo, la presentación de este nuevo movimiento del Pelado Gorriarán pasaba desapercibida para la clase dirigente y los principales medios rentados por el gobierno.

Mientras las Fuerzas Armadas son sistemáticamente sentadas en el banquillo de los acusados y sus conductores están pensando en borrar la palabra subversión del diccionario castrense por miedo a ser considerados genocidas, el dirigente del Partido Revolucionario de los Trabajadores y de su brazo armado, el Ejercito Revolucionario del Pueblo, se da el lujo de fundar un nuevo movimiento político. ¿Qué sentirán en estos momentos los familiares de los caídos en el Ataque al Regimiento de Infantería 3 de la Tablada el 23 de enero de 1989? ¿Es que a alguien le importa?¿Cómo hubieran reaccionado las organizaciones de derechos humanos si el general Videla o el recientemente fallecido Suarez Mason hubieran presentado en sociedad una nueva estructura política?.

Para reflexionar sobre este siniestro personaje de la historia argentina los invito a compartir el pensamiento de un viejo compañero de armas de esta facción político – militar conocida con el nombre de ERP. En su libro titulado, “El Furor y el Delirio”, Jorge Masetti nos desnuda con crudeza intimidades de los movimientos revolucionarios en América Latina.

El encuentro relatado ocurrió en la ciudad de Roma en el año 1976... “a las 9 de la noche me interceptó el compañero con quien tenía que verme. No hicieron falta las presentaciones; era el pelado Gorriarán... Había participado y dirigido las principales operaciones militares del ERP. En 1972 se fugó del penal de Rawson junto con Santucho y otros miembros del buró político. Era jefe de estado mayor del ERP... era todo un símbolo dentro del partido...”

Continúa diciendo “bajo la dirección de Gorriarán, debía colaborar en algunas tareas destinadas a fortalecer el aparato del partido, buscar medios económicos y apoyar algunas actividades logísticas vinculadas a operaciones militares en el interior del país. ... las tareas operativas que pudieran presentarse serían totalmente independientes del trabajo de solidaridad y siempre estarían orientadas por el Pelado”. Como podemos observar, Gorriarán y sus amigos continuaban conspirando desde el exterior.

Respecto a otro encuentro, esta vez en España (los fondos no le faltaban a estos profesionales de la revolución), nos cuenta Masetti: “... después... pasó a explicarme que los planes del partido no podían realizarse por falta de recursos. Tampoco teníamos las condiciones de seguridad necesarias para realizar operaciones financieras, es decir expropiaciones, en nuestro país. Debíamos, por tanto, operar en el exterior para procurarnos los recursos necesarios.... no operaríamos en países donde desarrolláramos tareas de solidaridad. Ya existía una pareja en un país de América Latina dándole cobertura a una casa para realizar una operación de secuestro. El compañero que se había sentado con nosotros y yo mismo tendríamos que viajar allí mismo de inmediato”. Si, todo esto lo planificaba el actual dirigente del Partido por el Trabajo y el Desarrollo.

Y continúa nuestro amigo Jorge: “en abril de 1977 en una reunión del ejecutivo del partido, se adoptó el Plan Tanga, que consistía en sacar del país a los cuadros quemados, en organizar escuelas políticas en el exilio y en preparar un retorno masivo para implantar en la montaña un núcleo militar... proseguíamos nuestra guerra lejana perpetuando sus rituales. El día comenzaba con una formación militar en el centro del patio y el saludo a la bandera del ERP” (por lo visto, el trapo rojo cuya mención ¿casi? le cuesta una sanción a un actual Jefe de Regimiento, existía realmente).

“... el recogimiento en los estudios se prestaba a la reflexión y a la discusión. Así empezaron a manifestarse las diferencias políticas, y estas giraban, fundamentalmente en torno a la cuestión de la lucha armada... la corriente dirigida por el secretario general quería abandonarla. Otra corriente, de claro carácter militarista, identificada con el Pelado Gorriarán, tendía a apresurar el retorno al país. Su perspectiva consistía en el establecimiento de un núcleo guerrillero en la montaña y la infiltración, en las ciudades, de equipos operativos en vinculación con los frentes de masa sindicales y populares... Yo participaba en la escuela del frente militar, que lógicamente debía haber estado bajo la dirección del Pelado Gorriarán, pero como este se encontraba en Colombia con las FARC, lo reemplazaba el Flaco Santiago”...

“Era indispensable procurarse armas... para proteger a los miembros de la dirección y ... para poder pasar a la acción de recuperación de fondos... logré procurarme dos 7,65 y una P38 que me llevé a España, donde se encontraban el Pelado y Martín. Varios ataques a cajas de ahorro fueron coronados por el éxito, pero el ataque a un banco provocó tres arrestos... en estas circunstancias decidimos escribirle una carta al Pelado anunciándole que nos separábamos del partido, informándole de nuestra intención de irnos a luchar a Nicaragua”.

Ya desde Nicaragua nos sigue contando Masetti: “No sé cuanto tiempo había pasado cuando, por casualidad, me encontré con el pelado Gorriarán... decía que todo lo que estábamos aprendiendo allí podríamos aplicarlo en nuestro país una vez terminada la guerra... el 19 de julio de 1979, la revolución sandinista triunfaba. El ERP de Argentina estaba presente”.

... Un día fui a ver al Pelado, que se había quedado en los servicios de seguridad y me contó que sería posible llegar hasta el comandante Bravo, jefe de Operaciones de la Guardia nacional somozista... nos pusimos a organizar de inmediato el plan de ejecución.... decidimos que sólo dos compañeros operarían: el Pelado y otro... Una tarde, poco tiempo después de la partida de los compañeros, escuchábamos las noticias de una radio hondureña. Al comandante Bravo, de la ex Guardia Nacional de Nicaragua, lo habían encontrado muerto de un disparo en la cabeza... Había llegado sin escolta a la casa de su amante, pero también lo aguardaba el Pelado con su pistola”.

Tiempo después reconocía el erpiano arrepentido: “Desde que nos encontramos me había sentido próximo al Pelado, pero no podía seguir creyendo en sus elucubraciones... Había instaurado un verdadero culto a su personalidad, había centralizado el mando, mientras que nosotros abogábamos por una dirección colectiva... la victoria sandinista había reavivado nuestro espíritu... así es que sin el menor esfuerzo de análisis teórico, práctico o histórico, pretendíamos trasplantar a Argentina la experiencia nicaragüense.

“.. a pesar de las diferencias que tenía con el Pelado, me quedaba una dosis de afecto por él, pero descubrí que no era el mismo que había conocido... Cuando regresó a Managua después del atentado a Somoza, el frente sandinista lo condecoró con el grado de comandante . Poco a poco dejó de ser el Pelado y pasó a ser el Comandante Ricardo... Vivía en una lujosa casa de Managua y se desplazaba en Mercedes Benz. Se fue convirtiendo en la única voz de la organización. Se rumoreaba incluso que había llegado a matar a algunos compañeros por diferencias políticas... se sentía dueño de la vida y de la muerte de cualquier hombre en función de su iluminación política”.

Finalmente, Masetti nos transmite sus reflexiones en torno a lo que sintió después del ataque a los Cuarteles de La Tablada en 1989. “Más me impresioné cuando vi la lista de muertos. La mayoría eran amigos míos. Allí estaban el Gordo Sánchez, con el que combatí en Nicaragua. El Galleguito Caldu... El Caña... Cecilia... Y tantos otros muertos estúpidamente en una operación insensata. EL Pelado se había salvado... cargará en la conciencia, si es que aún la tiene, de haber llevado a la muerte tanta vida joven y revolucionaria, sin ningún sentido... tan sólo por alimentar su ego y su afán de poder”.

Lamento haberlos cansado a los lectores con la reproducción de partes de la obra de Jorge Masetti, pero como no es un libro de alcance masivo, me parece que sus reflexiones ayudan a conocer en profundidad a un dirigente que hoy pretende crear un espacio político para defender su ideología.

Mientras muchos de los militares que combatieron a este siniestro personaje ocupan cárceles del pueblo por haber defendido a nuestra patria, el Comandante Ricardo, bajo el silencio cómplice de las autoridades nacionales, se presenta en sociedad... y en este mundo al revés que representa nuestra pobre Argentina, quien pudiera asegurarnos que dentro de poco, no lo encontremos ocupando algún escaño en el Congreso o algún puestito de asesor de este gobierno de montoneros que nos toca padecer.

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viernes, 24 de junio de 2005

Los Mercaderes de la Subversión

El domingo próximo pasado tuve la oportunidad de participar en el Programa Hora Clave que conduce el Dr Mariano Grondona. El tema a debatir: la declaración de inconstitucionalidad de las Leyes de Obediencia Debida y Punto Final. Favorables a lo dictaminado por la Corte Suprema se encontraban el ¿Ex? Montonero Roberto Perdía, la Senadora Diana Conti y el Doctor Marcelo Parrilli. En defensa de las Instituciones Republicanas y el Estado de Derecho, el Dr Florencio Varela, el Teniente Coronel R Igounet y quien suscribe estas líneas.

Sin entrar a considerar lo positivo y/o negativo del programa aludido - por demás con opiniones muy divergentes, aún entre quienes comulgan con ideales similares - quisiera compartir con ustedes algunas reflexiones surgidas de esta interesante experiencia.

La confrontación de ideas me permitió confirmar la existencia de dos posiciones claramente divergentes entre los partidarios de la revolución marxista. De un lado, los combatientes, los delincuentes subversivos que tomaron las armas en la década del 70, con el objetivo de instaurar un estado socialista a punta de metralla. Ellos siguen convencidos de la justicia de su causa y manifiestan con orgullo haber participado de una guerra contra las fuerzas de la “oligarquía”.

Ellos no se sienten representados por esa triste imagen de chicos buenos y soñadores, criaturas indefensas perseguidas por la clase militar. Se reconocen combatientes, son setentistas de ley. Roberto Perdía se encuentra entre ellos y quiso reivindicar su causa perdida. El fue un guerrillero, tomó las armas, arriesgó su vida y mató por su quimera roja.

Mario Firmenich, otro dirigente de esta locura revolucionaria, declaraba el 17 de marzo de 1991: “Habrá algún que otro desaparecido que no tenía nada que ver, pero la inmensa mayoría eran militantes montoneros... yo se como vivieron ellos, a mi me hubiera molestado que mi muerte sea utilizada en el sentido de que un pobrecito dirigente fue llevado a la muerte”.

Por su parte, el hermano de María Claudia Falcone, considerada mártir en “La Noche de los Lápices” manifestaba: “Mi hermana no era una chica ingenua que peleaba por el boleto estudiantil. Era una militante convencida... No fuimos perejiles como dice la película de Héctor Olivera. En el departamento donde cayó mi hermana se guardaba el arsenal de la Unión de Estudiantes Secundarios de La Plata... tenía práctica política y militar”.

De estos profesionales de la revolución, Jorge Masetti, un erpiano convertido, amigo de Gorriarán Merlo, diría: “Hoy puedo afirmar que por suerte no obtuvimos la victoria, porque de haber sido así, teniendo en cuenta nuestra formación y el grado de dependencia de Cuba, hubiéramos ahogado el continente en una barbarie generalizada. Una de nuestras consignas era hacer de la Cordillera de los Andes la Sierra Maestra de América Latina, donde primero, hubiéramos fusilado a los militares, después a los opositores, y luego a los compañeros que se opusieran a nuestro autoritarismo; y soy consciente de que yo hubiera actuado de esta forma”.

Estos personajes inspiran miedo... no tengo vergüenza en afirmar que salí del programa de televisión temblando como una hoja. La mirada dura y llena de odio de Perdía me llegó muy profundo... pero también tengo que aceptar que su postura inspira respeto. Este hombre no mentía, no tenía un doble mensaje, no se burlaba, miraba a los ojos. Había tomado las armas y las tomaría seguramente de nuevo... estuvo y estaba dispuesto a matar y a morir por sus pobres ideales.

La otra posición pseudo revolucionaria estuvo representada por sus compañeros de mesa: La Senadora Conti y el Sr Parrilli. Verdaderos abanderados de los derechos humanos hemipléjicos, que lucrando con ideales prestados se desesperaron hasta el delirio por callar a su defendido. Mercaderes con estilo gramsciano, que en la década del 70 no tuvieron los atributos suficientes para empuñar el fusil y que hoy se consideran los dueños de la verdad.

La senadora coqueta, que fuera denunciada por corrupción por uno de sus principales asesores, ha encontrado en el ataque a las Fuerzas Armadas la única idea propia para mantener su debilitado peso político. Y el impresentable doctor Parrilli, que disfrazando de soberbia sus limitaciones intelectuales, ha hecho de los derechos humanos un negocio redituable y causa de su buen vivir.

De ellos, al igual que de nuestro presidente ochentista, podemos afirmar que representan los mercachifles de la subversión. Verdaderas caricaturas de los revolucionarios auténticos. Mientras unos pretenden ganar votos de los desmemoriados... los otros se llenan los bolsillos lucrando con la historia oficial. Unos y otros ganan a costa de las instituciones de nuestra patria.

Si la personalidad de Perdía inspira miedo y un dejo de respeto, la de estos improvisados sólo mueve a lástima y desprecio. Si el setentismo es culpable de terrorismo, el ochentismo de Alfonsín, Kirchner y sus aliados es responsable directo de pisotear la historia verdadera y de engañar a las futuras generaciones respecto a lo que realmente pasó en nuestro país.

Y a la hora de repartir responsabilidades no puedo dejar de decir que entre los ochentistas de la subversión, el Señor Bendini, Jefe del actual Ejército Argentino, se ha constituido en un alumno aventajado de Martín Balza. El arresto al Teniente Coronel Roberto Augusto Vega, jefe de un regimiento en la provincia de Salta, por cometer el pecado imperdonable de contar la verdadera historia, demuestra acabadamente que el uniforme y las insignias ya no son sinónimo de valor... salvo honrosas excepciones cada vez más excepcionales.

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viernes, 17 de junio de 2005

La Hora de la Traición

El 14 de junio pasará a la posteridad como una de las fechas más tristes y oscuras de nuestra historia. Un día como este, veintitrés años atrás, nuestro país firmaba la rendición frente a las tropas inglesas. El 14 de junio del año 2005, una nueva frustración se cierne sobre nuestra patria. Las fuerzas subversivas derrotadas por las armas en la década del 70, obtienen un importante triunfo político, mediante la declaración de inconstitucionalidad de las Leyes de Obediencia Debida y Punto Final.

Su botín de guerra: la cárcel del pueblo para sus enemigos de ayer y el aplauso trasnochado de una minoría desmemoriada que reniega de la bandera Celeste y Blanca. Porque a no dudarlo, los que festejaron esta medida de la Corte Suprema de Injusticia, son aquellos representantes del odio y la violencia, partidarios de la democracia popular al estilo cubano. Como siempre, acompañados por los infaltables personajes sin principios, que por mantener sus prebendas no dudan en entregar a su propia madre.

De lo contrario, lo sucedido no encuentra ninguna explicación. Hace aproximadamente dieciocho años, un presidente elegido democráticamente presentó dos proyectos de ley, que después de ser aprobados por el congreso, contaron con el visto bueno de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Años después, otro congreso, instigado por un nuevo Poder Ejecutivo, en abierta violación a lo establecido en la Constitución Nacional , anula dichas leyes; y otra Corte Suprema de Justicia, también presionada por el presidente, termina decretando que dichas leyes son inconstitucionales. Parece un trabalenguas, pero es la triste realidad de las instituciones de nuestra patria... no somos un país serio, no somos un estado previsible, no disponemos de seguridad jurídica, ... el presidente Kirchner ha instaurado una monarquía absoluta con cortesanos obsecuentes disfrazados de republicanos.

El régimen presidencialista se ha teñido de rojo y todas las decisiones institucionales están viciadas por el mismo odio revanchista. La criticada Corte Automática de Menem ha sido reemplazada por una Corte Adicta al nuevo emperador... con los evidentes antivalores ideológicos y las nefastas convicciones del primer mandatario.

La alegría por parte de algunos era previsible... Resulta natural que las Organizaciones Revolucionarias, mimetizadas detrás de la fachada de organismos de Derechos Humanos, levanten su copa para brindar por la victoria alcanzada. Es lógico que nuestro presidente y su madre adoptiva, acompañados por sus viejos compañeros de armas, disfruten el momento de júbilo y griten al unísono “Kirchner lo hizo”, como slogan de su campaña publicitaria.

Lo que no se termina de comprender es la actitud de algunos uniformados en actividad y en retiro que consideran a este fallo como algo positivo que va a contribuir a la pacificación nacional y al reencuentro de todos los argentinos... ¿Estarán hablando en serio? ¿Están también ellos en campaña política? ¿Pueden mirar a los ojos a sus subalternos y continuar ejerciendo el mando? ¿Dónde estuvieron prestando servicios en la década del 70?. Personalmente hubiera preferido que como mínimo respetaran aquella máxima sanmartiniana del hablar poco y lo necesario... porque si de algo estoy totalmente convencida es de que este pensamiento no representa el verdadero sentir de nuestras Fuerzas Armadas.

Por el contrario, su actitud me recuerda que en casi todos los ataques a cuarteles militares durante la guerra contra la subversión, siempre participaron entregadores internos. El soldado Petiggiani, traicionó a sus pares durante el Ataque a la Fábrica Militar de Pólvoras y Explosivos; el Conscripto Mayol hizo lo propio durante el intento de copamiento del Regimiento de Monte 29; el Soldado Stanley, favoreció el asalto al Batallón de Arsenales 121 y el dragoneante Invernizzi facilitó al ERP el ataque al Comando de Sanidad del Ejército.
En Junio del 2005, vaya a saber porqué, pareciera ser que algunos uniformados de mayor jerarquía, con sus palabras y con sus silencios, han decidido imitar a estos auténticos traidores a la patria.

Publicada en SEPRIN

viernes, 10 de junio de 2005

La Política y las Convicciones a la Hora del Plebiscito

Meses atrás, la imaginación talentosa de Jorge Asís, invitaba a los argentinos a elegir al Tweety Carrario de la política argentina. Les aclaro que como hermana de cinco varones y madre de otros cuatro - todos bien futboleros al igual que mi esposo - no me resultó difícil comprender el significado profundo e irónico de la mencionada invitación.

Para los menos entendidos en el arte de “la redonda”, les cuento que el tweety de marras es un jugador que se ha caracterizado por cambiar de camiseta en muchas oportunidades en los últimos tiempos. Por supuesto, esto no tiene nada de malo, es su trabajo, su profesión y lógicamente tiene que jugar donde más le conviene. Casi diría, repitiendo a los “fanas” de River, que la actitud de Carrario contrasta, por ejemplo, con la del Beto Alonso, que según dicen, siempre priorizó el jugar para el club de sus amores, el de los borrachos del tablón.

Pero el reconocimiento de legitimidad ética a los jugadores de fútbol no se condice con la situación de los políticos. No se entiende cómo un político que jugaba en el equipo de Menem, pase al de Duhalde y de aquí al de Kirchner, sin siquiera un dejo de rubor en el rostro.

Felipe Solá, Martín Redrado, Alberto Fernández, Pampuro, y muchos otros, están compitiendo cabeza a cabeza por alcanzar el Tweety de broce, el de madera o cuando menos el de plástico. Y todos tienen méritos suficientes... han jugado y siguen jugando al mejor postor... al que les ofrece el mejor cargo... ¿Dónde habrán quedado los principios y las convicciones? ¿Donde el amor a la camiseta? Son pocos los imitadores del gran Beto Alonso.

Pero la intención de estas líneas no es plagiarle el pensamiento al maestro Asís, sino que, partiendo de esta base, lleguemos a encontrar el gran Pupi Zanetti de nuestra Clase Política. Y en esto no tengo dudas que nuestro presidente lleva mucha ventaja y que los meses que quedan hasta las elecciones de Octubre le permitirán acceder al Gran Pupi de Oro.

Paso a explicarme... el citado jugador, dicen los entendidos, tiene flexibilidad para jugar en distintas posiciones en la cancha. Si hace falta un marcador lateral por la derecha (¿Se dice así, no?) el número 4 le viene bien. Si ese puesto está cubierto, también puede jugar de volante (es increíble lo que se aprende rodeada de varones) y si éste está ocupado, puede desempeñarse como hombre de punta.

Podríamos decir, en prosa futbolera, que con tal de jugar, no le hace “asco a nada”. Los amigos del Tweety cambian de camiseta como de medias, pero los representados del Pupi no tienen vergüenza alguna para cambiar de posición de acuerdo a como sopla el viento. Lo que en la jerga popular ha sido bautizado con el nombre de veleta.

Tal vez ahora se pueda comprender mejor porqué afirmo que será difícil quitarle el premio al señor Nestor Kirchner. Paso a explicarme:

Hace un par de años, cuando necesitaba un aliado en la Capital Federal para derrotar a la derecha política del macrismo, brindó todo su apoyo a Aníbal Ibarra, permitiendo con su caudal de poder y de fondos, que su delfín ideológico triunfara en la contienda. Hoy, cuando los vientos de la opinión pública se han vuelto negros para este representante de la izquierda, el favorecido de entonces pasó a ser una mala palabra para la política oficial. Porque claro... se viene octubre y por los votos, hay que dejar de lado las convicciones...

Para acabar con la mayoría automática de la corte menemista y por supuesto, construir una corte totalmente independiente - de Menem por supuesto - pero totalmente adicta y funcional al nuevo emperador, el presidente se encargó personalmente de proponer e imponer a jueces probados en el llamado garantismo jurídico progresista... en otras palabras, magistrados que defienden a ultranza los derechos de los procesados, siempre y cuando no sean militares... porque para ellos no hay garantías constitucionales que los protejan.

Hoy, un año después de haber promovido a dichos jueces, afines ideológicamente, cuando la sensibilidad social se opone a la libertad de ciertos procesados, automáticamente cambia de posición y critica abiertamente las resoluciones de aquellos que simplemente aplicaron lo que siempre defendieron. Pero claro, se viene octubre y por los votos siempre será válido dejar de lado los principios.

Tiempo atrás, en un acto de barbarismo político, jurídico y moral, se enfrentó abiertamente con la Iglesia , pretendiendo desplazar al Obispo Castrense de las Fuerzas Armadas, dejando de asistir a los históricos funerales del Papa Juan Pablo II, negándose a humildemente a doblar su rodilla ante el nuevo Vicario de Cristo o escapando a las palabras del Cardenal Primado de la Argentina , al organizar un 25 de Mayo lejos de la Ciudad de Buenos Aires. Hoy nos enteramos de que ha designado a Monseñor Ferrari en la Embajada de Argentina ante El Vaticano, para limar asperezas y congraciarse con una parte del clero. Porque claro, se viene octubre y hay que recomponer las relaciones... las convicciones anti - religiosas tienen un límite y por los votos, todo es negociable.

Desde que asumió su gobierno, los piqueteros constituyeron el sector más mimado de la política progresista del presidente, hasta el punto que usó de sus servicios, como otrora lo hiciera el pocho con sus formaciones especiales, para cumplir con algunas funciones oscuras de su política de gobierno, tales como organizar un boicot contra algunas empresas “imperialistas”. Días atrás, cuando descubrió que si quería ganar en las elecciones, tenía que atraer para su rebaño a esa humilde y sencilla clase media que no tiene ideología y que lo único que quiere es ejercer su derecho a circular, trabajar y estudiar... arremetió duramente contra sus viejos compañeros de ruta... porque claro, se acerca octubre y ya no son más funcionales al gobierno.

Por esto y por mucho más, como dice una vieja canción, considero que por algunos meses el señor Néstor Kirchner será imbatible en su lucha por el Pupi Zanetti de oro. Pero, por favor, ciudadanos argentinos... no se confundan, no se dejen engañar, tengan memoria, el verdadero rostro del presidente no es el que seguramente veremos en el futuro cercano. La careta que tratará de mantener por algún tiempo no representa su auténtico sentir. Aunque en el fondo, no creo que nos haya mentido cuando dijo que no iba a dejar sus convicciones en la puerta de la casa rosada, ya que al parecer, simple y sencillamente nunca las ha tenido.

Tengamos memoria. El futuro de nuestra patria depende de ello.

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viernes, 3 de junio de 2005

Comandante en Jefe ¿De qué fuerzas?

El 29 de Mayo, los argentinos conmemoraron un nuevo aniversario de la creación del Ejército Argentino. Cuarenta mil ciudadanos se dieron cita en el Barrio de Palermo para acompañar a los hombres de armas en su día... el Presidente de la Nación estaba muy ocupado descansando en El Calafate, como para cumplir con su misión de Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas.

Un nuevo desplante a una institución fundacional de nuestra Patria, la que para contar con su presencia, en un gesto de humildad, cuando no de servilismo, había decidido adelantar el festejo para que éste no coincidiera con otros compromisos asumidos previamente por el Señor Kirchner.

El hecho llama la atención porque el 25 de Mayo, en un discurso proselitista propio de un candidato en campaña, el presidente había llamado a la unión nacional de todos los sectores... parecía que por fin iba dejar sus nefastas convicciones ideológicas y comenzaría a gobernar para todos los argentinos... pero nuevamente los hechos desmintieron categóricamente sus palabras y fiel a su estilo adolescente, prefirió renunciar a cumplir aquellas obligaciones que le desagradan... Total él es el emperador, él es el monarca y puede hacer lo que le place.

No obstante, el 31 de mayo, el presidente sí tuvo tiempo y ganas para desplazarse hasta Santa Rosa, en La Pampa , para rendir un homenaje a Lucía Tartaglia, una presunta desaparecida durante el último gobierno militar y compañera de lucha de sus años montoneriles.

Por supuesto, no dijo una palabra referida al secuestro y posterior asesinato del general Aramburu, que también había ocurrido el día del Ejército Argentino, un 29 de mayo del año 1970. Terrible hecho delictivo con el cual los jóvenes idealistas del señor presidente se presentaban en sociedad para dejarnos su mensaje democrático y republicano. Llama la atención que el Jefe de Estado Mayor del Ejército, en su largo discurso, tampoco recordara un hecho tan caro a los sentimientos castrenses, pero por supuesto, eso hubiera sido políticamente incorrecto y todavía estaban muy frescos los recuerdos del relevo del comandante de la brigada blindada II.

Pero tenemos que reconocer que el presidente, al menos en la actualidad - cuando sus enemigos uniformados han sido totalmente derrotados en el campo político- es consecuente con la nefasta ideología asimilada de su madre espiritual.

Y lógicamente me estoy refiriendo a las Madres de Plazo de Mayo, quienes el 26 de mayo próximo pasado, despojándose de toda fachada, declaraban: “mañana en la Universidad vamos a conmemorar el nacimiento del PRT, el Partido Revolucionario de los Trabajadores... hace muchos años que las Madres reivindicamos a todos los desaparecidos, a todos los revolucionarios, no sólo de Argentina, sino de toda Latinoamérica... cada vez que se haga alguna actividad de cualquier grupo guerrillero, revolucionario, las Madres vamos a ir, vamos a hablar y vamos a emitir nuestra opinión... estamos decididas a seguir reivindicando la revolución y el socialismo que era el paso increíble que estaban dando nuestros hijos y que no lo pudieron cumplir del todo. Nosotras estamos convencidas de que en algún momento llegará”.

También en estos días, se cumple un nuevo aniversario de la muerte de otro desconocido del poder político... el 04 de junio de 1975, el Ingeniero Raúl Alberto Amelong, gerente de relaciones Industriales de la Empresa Metalúrgica ACINDAR, padre de 11 hijos, caía asesinado por esos jóvenes idealistas en los brazos de una de sus niñas. Este buen esposo y padre ejemplar había declarado días antes de morir que “confiaba en la Divina Providencia y que si algún día le tocaba morir en forma violenta rogaría a Dios para perdonar a sus asesinos".

Hoy, seguramente desde el cielo también estará pidiendo por los amigos idealistas del presidente Kirchner, quienes no conformes con haberle truncado la vida, hoy le quitan la libertad a uno de sus hijos, que con el grado de Teniente Coronel, es uno de los tantos presos políticos de este régimen dictatorial. Porque claro... los derrotados por las armas en la década del 70 hoy gobiernan nuestra nación...

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viernes, 20 de mayo de 2005

Todos a la Plaza por una Nueva y Gloriosa Nación

Nos acercamos a una fecha trascendente para todos los argentinos. El 25 de mayo de 1810 se constituía el primer gobierno patrio. Los hijos de esta tierra tan amada se reconocieron mayores de edad y empezaron a transitar el arduo camino hacia la independencia.

La clase dirigente de esos difíciles años estuvo a la altura de las circunstancias. El pueblo supo acompañar y legitimar las decisiones tomadas por la misma. Entre los miembros de la Primera Junta de Gobierno se encontraban dos abogados, un comerciante, un profesor, un marino, un economista, un sacerdote y hasta dos militares, de los cuales uno fue elegido presidente de la Junta.

Sí, aunque le pese al gobierno enquistado en el poder, en la construcción de nuestra Patria las Fuerzas Armadas y la Iglesia tuvieron una parte decisiva, fueron instituciones fundacionales de nuestra nacionalidad y contribuyeron activamente en la construcción de esta querida Argentina.

Las nuevas autoridades supieron marcar un rumbo, tuvieron un sueño de libertad, unieron sus esfuerzos y alcanzaron la meta. Todos, hombres y mujeres, civiles y militares, religiosos y laicos, deponiendo sus intereses mezquinos y enfrentamientos estériles, supieron mirar hacia el futuro y abrieron la senda hacia una nueva y gloriosa nación.

¿Qué distinta sería la historia si la actual dirigencia política tuviera cuando menos una pizca de los valores y principios de nuestros antepasados? ¿Qué distinta sería la Argentina si el presidente comprendiera que la división, el revanchismo y su falta de madurez personal y cívica no ayudan para concretar la unión de todos los argentinos?.

En 1810, las autoridades constituidas depusieron sus diferencias y miraron hacia el futuro... resultado: civiles, militares y religiosos construyeron un nuevo país para todos. En el 2005, el gobierno constituido de espaldas a la Constitución , quizás por la incapacidad de concretar un proyecto político que nos represente, mantiene su poder dividiendo a los argentinos, despreciando a las instituciones republicanas y volviendo su mirada hemiplégica hacia un pasado reciente, que en nada nos ayuda a salir adelante.

Por eso, este nuevo 25 de Mayo, mientras el presidente en su impertinencia adolescente y/o falta de visión estratégica, ha decidido romper con la presencia del primer mandatario en el tradicional Tedéum en la Catedral de Buenos Aires... nosotros, los argentinos del silencio y del trabajo, tenemos la oportunidad única de demostrarle que se está equivocando en su visión de la política. Y de igual manera que lo hizo el pueblo argentino, allá por 1810, exigirle frente al Cabildo, con nuestra presencia ciudadana, que comience a gobernar para todos los argentinos.

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viernes, 13 de mayo de 2005

Los Sobresueldos, la Etica y la Política

Sin lugar a dudas, el tema de la semana instalado en los medios oficialistas y de la oposición (gracias a Dios todavía quedan algunos) ha sido la existencia de sobresueldos en la segunda “década maldita” al decir del gobierno.


Plumas de mayor ingenio y preparación, que se han referido al tema con precisión y autoridad, me eximen de ahondar en los aspectos políticos y jurídicos de la cuestión. ¿Constituye ésta una maniobra del oficialismo para alejar de la “opinión publicada” el fantasma de los fondos desaparecidos de la provincia de Santa Cruz o la responsabilidad de muchos funcionarios sin uniforme en el escándalo de las narcovalijas? ¿Se mantienen en la actualidad los sobresueldos tan denostados de la década del 90? ¿Porqué el gobierno se niega sistemáticamente a dejar sin efecto los decretos referidos a los fondos secretos que fueron dictados por tenebrosos gobiernos de facto?.

Estos y otros interrogantes han sido ampliamente considerados en los medios de prensa del país, poniendo al descubierto el poco compromiso con la verdad de los principales medios de comunicación social, que funcionan muchas veces como auténticas oficinas de prensa de la Casa Rosada.

En lo personal, he preferido dedicar esta columna para reflexionar sobre algunas implicancias éticas de los hechos analizados. Funcionarios del gobierno y de la oposición se han referido a la ilicitud ética de los sobresueldos, con la correspondiente sanción moral para los implicados, independientemente del carácter delictual que estas conductas revelan.

Y esta referencia a la ética por parte de algunos funcionarios y periodistas ha puesto de manifiesto la hipocresía y desconocimiento que caracteriza a buena parte de nuestra clase dirigente, donde pareciera ser que la ética y la moral, sólo se entienden en un sentido exclusivamente monetario y la honestidad se mide escrupulosamente en función de la variable dinero.

Se apela a la ética para condenar los sobresueldos, por otra parte perfectamente condenables, mientras se reparten profilácticos entre los jóvenes, escandalizando sus conciencias y violentando la autoridad de sus padres.

Se miente y se engaña descaradamente a la población, publicitando como héroes nacionales a terroristas confesos, mientras se condena a miembros de las fuerzas legales, que por orden del gobierno constitucional salieron a la calle a enfrentar a la subversión marxista. ¿No está la mentira y la difamación reñidas con la ética?

Se forma una Corte Suprema de ¿Justicia? a la medida de las necesidades gubernamentales, imponiendo magistrados cuando menos discutidos en su imparcialidad, entre las que se destaca una desaparecida aparecida y un declarado defensor de conductas agraviantes a la moral pública. Esta falta de respeto a la división de poderes que caracteriza a una verdadera república ¿No se encuentra reñida también con los valores éticos y morales que pregona el gobierno?.

El chantajear y amordazar a algunos medios de prensa a través de publicidad financiada con fondos públicos y la tendencia manifiesta a gobernar a través de decretos presidenciales, que desconocen la función honorable del Congreso de la Nación ¿Puede considerarse una conducta ética del oficialismo?.

Esa actitud de permanente confrontación y menosprecio a las distintas instituciones fundacionales de nuestra república, ¿Puede encuadrarse dentro de los principios morales que llaman en forma permanente a la humildad, a la reconciliación y a la unión de todos los argentinos?.

No... y mil veces no... sólo una visión hemipléjica de la ética, reducida a los aspectos exclusivamente monetarios, cuando no una hipocresía manifiesta, le permite a los funcionarios de este régimen levantar el dedo acusador hacia otros miembros de la “clase dirigente” Argentina.

Los aspectos antedichos no constituyen ni por asomo una defensa de los funcionarios que caracterizaron la década del 90, muchos de los cuales se encuentran reciclados en la actual administración, sino que pretenden contribuir a elaborar una visión integral del problema.

Por otro lado, ponen en evidencia la necesidad de que todos los ciudadanos que todavía creen en una política con mayúsculas, basada en los valores y los principios, orientada al bien común de todos los argentinos, salgan de sus nidos y se comprometan por hacer realidad ese sueño de una verdadera república. De lo contrario, nuestros hijos continuarán viviendo en la truchocracia que hemos sabido conseguir.

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viernes, 6 de mayo de 2005

La Hora del Compromiso

La última semana se ha presentado difícil para la política militar seguida por el gobierno. El revanchismo ideológico y la persecución consecuente hacia las Fuerzas Armadas, en su odio manifiesto a todo lo que viste uniforme o sotana, ha generado en una situación conflictiva que promete escalar en el corto plazo, si el presidente no entiende que debe dejar sus nefastas convicciones a la puerta de la casa de gobierno y comienza a gobernar como presidente de todos los argentinos.

Esta situación también tocará de cerca a las autoridades castrenses, donde su liderazgo interno dependerá de que asuman la responsabilidad que les compete, defendiendo sin pudor y vergüenza a los hombres que simple y sencillamente cumplieron con su deber en la guerra contra la subversión. Guste o no guste escucharlo, muchos de los detenidos por presuntas violaciones a los derechos humanos, actuaron en el cumplimiento de las leyes y reglamentos militares... y las autoridades actuales no pueden, ni deben dejarlos solos, porque aquellos se jugaron la vida por la institución que hoy ellos tienen el honor de presidir.

La reciente y polémica aparición de los reglamentos reservados de la década del 70 demuestra con claridad manifiesta que el combate contra los enemigos de la democracia se hizo dentro del marco jurídico vigente en la época y que el accionar de las fuerzas armadas no estuvo caracterizado por la ilegalidad, como nos han insistido hasta el cansancio los apóstoles del odio, representados hoy por los amigos del presidente.

A las valientes palabras del Tcnl (R) Franceschi Carabajal en el Círculo Militar, en oportunidad de rendirse un justo tributo al Tte 1ro Mario César Asúa, asesinado vilmente por las Fuerzas Armadas Revolucionarias, y que algunos “prudentes” ¿camaradas? pretendieron silenciar, se suma la decisión de un oficial actualmente detenido en un Cuartel Militar que se resiste a ser trasladado a otras dependencias, negándose a acatar las órdenes del comisario político a cargo de la causa.

Si a esto le agregamos el comunicado del foro de brigadieres retirados de la Fuerza Aérea llamando a la pacificación nacional, la carta de lectores del Cnl ® Bernardo Menéndez, parcialmente publicada por el diario La Nación , y referida a la visión hemipléjica de la década del 70, todo parece indicar que una parte importante de las Fuerzas Armadas y la ciudadanía sin anteojeras ideológicas se está despertando de la modorra cansina que la caracterizaba, y se está decidiendo a contar la otra cara de la verdad. ¡Ya era tiempo de respirar un poco de aire fresco!

Frente a esta situación, ¿Qué nos queda a esa mayoría silenciosa que hasta el presente habíamos privilegiado permanecer en el anonimato, evitando la confrontación y tratando que el tiempo curara las heridas abiertas de ese doloroso pasado todavía muy reciente?. La estrategia del silencio en pos de la unidad de nuestro pueblo no ha dado resultado, sino que por el contrario, ha alentado a los enemigos de la verdadera república a continuar su guerra fraticida, a través de la acción política y la propaganda tendenciosa, con la complicidad, cuando no con la conducción manifiesta, de una parte importante del gobierno nacional.

A los argentinos del silencio, a Doña Rosa, como le gusta repetir a un grande del periodismo nacional, nos toca en el presente un mayor compromiso cívico. El mundo anda mal, no tanto por la audacia de los malos, sino por la tibieza y cobardía de los buenos. Nos toca a nosotros, dentro del marco de la constitución y las leyes, participar activamente en la construcción de una república auténtica, donde los dirigentes estén al servicio de la comunidad y no se sirvan de la misma.

Debemos salir del ostracismo en que voluntariamente nos hemos sumido, para gritar a los cuatro vientos que los argentinos de bien no nos hemos tragado el cuento de los jóvenes muchachos idealistas y que vamos a defender con todas nuestras fuerzas a aquellos ciudadanos con y sin uniforme, que en el cumplimiento de su deber, contribuyeron para que hoy podamos gozar de un país, donde al menos formalmente se respire la libertad.

No podemos dejarlos solos, muchos están presos porque Organizaciones No Gubernamentales, presuntamente defensoras de los derechos humanos, cobijadas y alimentadas por funcionarios del gobierno ideológicamente afines, presionan a los jueces para que estos se constituyan en empleados del poder ejecutivo, y hagan de la justicia una grotesca comparsa al servicio del dictador.

No podemos mirar al costado, no podemos hacernos los distraídos, si hoy claudicamos en la defensa de nuestros valores y principios, si hoy cerramos la boca porque todavía no llegaron a vaciarnos los bolsillos, poco faltará para que nuestro país se convierta en la nueva Cuba de Sudamérica.

Se acercan las elecciones tan esperadas, el oficialismo busca desesperadamente legitimar las barbaridades que viene cometiendo... tenemos nuestra oportunidad de demostrarle al presidente lo mucho que se está equivocando. Que comprenda que por cada capricho adolescente y por cada actitud setentista montoneril, perderá un tanto por ciento de los votos... tal vez de esa forma recapacite y pueda constituirse en el presidente que esta Argentina necesita.

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viernes, 29 de abril de 2005

Sr Presidente: Usted no es nadie

En relación con el conflicto desatado con la Iglesia , el Canciller del Régimen volvió a manifestar: “La posición del gobierno es irreductible e irreversible en el sentido de que monseñor Baseotto jamás será el ordinario militar”.

Como miembro de la familia militar le recuerdo al gobierno que en este tema no tiene ninguna autoridad y que su decreto bien podría ser utilizado como papel picado en una cancha de fútbol. Monseñor Baseotto sigue siendo el Obispo Castrense de las Fuerzas Armadas y no existe poder temporal en el mundo que pueda quitarle ese derecho y ese deber.

Señor presidente, por si no lo sabe, esto forma parte de la libertad religiosa propia de los países democráticos y civilizados. Su autoridad tiene un límite y usted no debe pasarlo. Usted está violentando la conciencia de los militares católicos argentinos y avasallando los derechos de la familia militar, que muy a pesar suyo también forma parte de esta Argentina.

Su gobierno manifiesta que hay libertad religiosa. Le recuerdo que en el decreto de nombramiento de Monseñor Candia como Administrador Apostólico del Obispado Castrense se usa la figura de “Sede Impedida”, que en el Siglo XX sólo se ha utilizado en aquellos paraísos comunistas donde la libertad sólo existe para hacer lo que le gusta al emperador de turno.

Sr presidente, ya que es tan democrático... ¿Por qué no hace una encuesta preguntando a las familias militares QUIEN ES el obispo Castrense?. Le aseguro que se va a llevar una sorpresa. Porque somos muchos los que no estamos dispuestos a dejar que los papelitos que usted firma pisoteen los derechos que nos da la Constitución Nacional.

viernes, 22 de abril de 2005

¿Dónde Iremos a Parar?

Días atrás leía con profundo pesar el estudio publicado por el Diario La Nación el pasado 11 de Abril referido a los objetivos y expectativas que mantienen los jóvenes de nuestra querida Patria.

Dejando de lado el hecho de que más del 45 % de los encuestados consideró que cometería actos de corrupción si esto les traería aparejada alguna ventaja económica, he preferido llamar a la reflexión sobre un hecho menos llamativo, pero más preocupante para el futuro de nuestro país. Presa de un impresionante individualismo, a la mayor parte de nuestros jóvenes sólo les preocupa su desarrollo profesional, su futuro trabajo, su felicidad personal, mientras que tan sólo un 2,3 % hizo referencia a cuestiones más trascendentes como el bienestar de su Patria y de sus semejantes.

El viejo adagio "la juventud ha sido hecha para el heroísmo y no para el placer" no guarda relación con la muestra de jóvenes que constituirán el día de mañana la clase dirigente de nuestra Argentina. El terreno de los ideales, otrora característico de la juventud, ha cedido a una alarmante mentalidad preocupada exclusivamente por el exitismo personal y éste relacionado en forma directa con la prosperidad económica.

El estudio refleja con precisión la magnitud de la crisis por la que atraviesa el sistema educativo en nuestro país, incluyendo en este a todas las instituciones y medios que guardan relación directa con la formación de los jóvenes, tales como la familia, la escuela y el mismo estado. También pone en evidencia que las soluciones simplistas y electorales, como la entrega de computadoras, la repartición indiscriminada de preservativos entre los jóvenes o la entrega de libros en la entrada de las canchas, no ofrecen una perspectiva adecuada para enfrentar los problemas que hacen a la formación de los futuros argentinos.

Es necesario establecer una concepción educativa que basada en los valores éticos y religiosos procure formar a nuestra juventud en las virtudes humanas y cívicas, donde la cultura del trabajo y la exigencia, fomente en ellos el compromiso por participar en la construcción de un nuevo país, dejando de lado el individualismo y la pereza. Las otras soluciones, las populistas y demagógicas, sólo acelerarán el camino de la autodestrucción.

Publicada en SEPRIN

sábado, 16 de abril de 2005

General Bendini

Entre los avatares desatados por las cartas públicas que escribí días atrás, hay un hecho que deseo destacar a través de la presente. El jefe del Estado Mayor General del Ejército, en relación con el levantamiento de la sanción a mi esposo, el mayor Mercado, por parte del presidente, dijo textualmente: «Nosotros respetamos, aceptamos y compartimos todas las medidas que imparte el Presidente de la Nación».

Como ciudadana puedo aceptar que, para evitar males mayores y por respeto a las instituciones republicanas, los hombres de armas se vean obligados a cumplimentar ciertas acciones, pero no puedo entender que el glorioso ejército argentino, en la persona de su comandante en jefe, manifieste con orgullo que comparte todas las medidas que toma el Presidente de la Nación.

¿Debemos entender que el ejército de San Martín y Belgrano comparte sumisamente la remoción unilateral de monseñor Baseotto como obispo castrense de las FF.AA.? ¿Comparte nuestro ejército la visión parcial, ideologizada, que este gobierno nos ha impuesto de la década del 70? ¿Considera el ejército argentino que está bien que mientras se juzga despiadadamente a los hombres que arriesgaron sus vidas en el cumplimiento de su deber, sus dignos oponentes sean resarcidos económicamente y disfruten sin vergüenza el botín de tantos actos delictivos? ¿Comparte realmente el ejército argentino la decisión de establecer un museo de la memoria donde sólo se recuerde la grandeza de esos «jóvenes idealistas» que desataron el odio y la violencia en nuestra querida patria? "Seguramente las declaraciones a la prensa del jefe de Estado Mayor fueron sacadas de contexto y no representan su verdadero sentir..., de lo contrario tendré que concluir que es un digno general del presidente que padecemos.


Publicado en Diario La Nación

miércoles, 30 de marzo de 2005

Amigos del Presidente

"Días atrás, como esposa de un oficial del Ejército Argentino, le dirigía una carta abierta al comandante en jefe de las FF.AA., manifestándole mi indignación por su actitud frente a nuestro legítimo obispo castrense, monseñor Baseotto.

El impresionante apoyo recibido me ha movido a dejar por escrito el pensamiento de muchos de los que vamos a expresar nuestro voto en las próximas elecciones de octubre. "Para aquellos que todavía confundidos por su retórica nacional no terminan de conocer el verdadero rostro de nuestro presidente, los invito a reflexionar sobre un viejo y conocido refrán de nuestra cultura popular: «Dime con quién andas y te diré quién eres».

Porque conociendo a los amigos del señor Kirchner podremos vislumbrar a quien elegimos los argentinos como presidente de la República... y sabremos también por qué no podemos volver a equivocarnos.

"Una de sus mejores amigas, considerada personalmente su madre espiritual, es la señora Hebe de Bonafini, quien de la mano del Gobierno, y nunca desmentida por sus voceros, invitaba a Su Santidad el papa Juan Pablo II «a pudrirse en el infierno». "

Otros de sus amigos nunca censurados, cuando terminaba el acto del 24 de marzo, se dedicaron a la tan artística labor de pintar la Catedral de todos los argentinos, con frases tales como «Iglesia basura, vos sos la dictadura»... condenándonos abiertamente a todos los que militamos bajo la bandera de nuestra Santa Madre: la Iglesia Católica, Apostólica y Romana.

"Señor Presidente: si éstos no son sus compañeros de ruta, dígalo abiertamente y condene con claridad lo que debe ser condenado por violentar la conciencia del pueblo argentino. En temas tan importantes permanecer en silencio es sinónimo de complicidad."

Carta publicada en Diario La Nación

domingo, 20 de marzo de 2005

Carta Abierta al Presidente

Con mucha indignación, como esposa de un Oficial del Ejército Argentino, me siento en la obligación moral de expresarle a nuestro presidente el sufrimiento y la desazón que puedo observar en muchos hombres de armas, como consecuencia de la situación creada en torno a la remoción de Monseñor Baseotto.

Creo que usted se está equivocando y mucho... Usted no tiene el menor derecho a remover al Obispo Castrense de las Fuerzas Armadas. Creía yo que los tiempos de la Monarquía Absoluta habían terminado, pero parece que en Argentina la cosa no es así.

Usted no es nadie... sí, lo repito nuevamente... usted no es nadie (aunque esto pueda golpear su evidente complejo de inferioridad) para remover a un digno sucesor de los apóstoles. El Santo Padre, el Vicario de Cristo en la tierra lo ha constituido en Obispo de las Fuerzas Armadas y no existe ningún decreto o papeleta firmada por un determinado presidente que pueda privar a Monseñor Baseotto del derecho y deber de ejercer su ministerio sobre el rebaño que Nuestro Señor Jesucristo, en la persona de Juan Pablo II, le ha encomendado.

“Dad al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios” nos enseña la Palabra de Dios, a no ser que esta cita bíblica también tenga reminiscencias setentistas... Haga su trabajo como presidente de los argentinos, ocúpese de los problemas temporales, que todavía son muchos y deje que la Iglesia cumpla su cometido eterno, siendo “Madre y Maestra”, velando por el alma de todos sus hijos, incluida la suya y la de su propio Ministro de Salud.

No se meta en un terreno que sólo puede crear división, no se equivoque de época, no estamos en el tiempo de los emperadores, usted no puede hacer lo que quiera... Vivimos gracias a Dios en democracia, y usted debe ser el primero en aceptar y respetar a las distintas instituciones que cumplen su cometido... Sea adulto, no se comporte como un niño malcriado que quiere ganar en todo... cuando uno se equivoca debe reconocer sus errores, pedir perdón y seguir adelante.

Nuestro país necesita que todos los sectores nos aunemos en un proyecto común... no exaspere los rencores y las divisiones... no violente las conciencias... porque los creyentes no estamos dispuestos a pasar por alto cuestiones que atañen a la fe y a los principios... No ponga a los militares católicos en la disyuntiva de obedecerlo a usted, su comandante en Jefe, o a su propia conciencia, porque no tenga ninguna duda que en las cosas de Dios, usted ha perdido la partida.

Si su corta inteligencia o su entorno no le permiten tener una mirada más amplia y profunda, le pido que al menos apele a la tradicional viveza criolla... si no puede o no sabe pensar en términos del bien y del mal, por lo menos hágalo considerando la conveniencia o no de sus actos... piense en los votos que pierde... no se olvide que la sangre de los mártires siempre ha engendrado nuevos y muy buenos cristianos... y somos muchos quienes ya consideramos a Monseñor Baseotto un perseguido del poder político en la Argentina... y que muy pronto habrá elecciones... y estoy seguro de que usted no quiere perder.

Muchas gracias.